domingo, 3 de abril de 2011

GONE WITH THE WIND - LO QUE EL VIENTO SE LLEVO

LO QUE EL VIENTO SE  LLEVO es una de mis películas preferidas. La he visto unas cien veces pero la que más me gustó fue verla en versión original y substitulada en español. Este día la vi de madrugada mientras todos dormían. Recuerdo que llegó a emocionarme tanto que es la única vez que he llorado con una película. Todo un peliculón.

sábado, 26 de marzo de 2011

Splendor in the Grass trailer (1961)


Éste trailer es de la película Esplendor en la hierba del director Elia Kazan.
No lo he encontrado en español.
A pesar de que es una película que me gusta mucho, me trae unos recuerdos entrañables.
Me trae a la memoria mi casa con mis padres, mis hermanos y mi queridísima abuela Edida.
Todos viendo la película que mis padres ya habían visto, puesto que eran unos "cinéfilos", y más de una vez nos desvelaban algunas secuencias.
La película la he visto varias veces y estoy segura que la volveré a ver más porque cada vez que la veo es como si fuera la primera, además me transporta a mi niñez con querida familia.

domingo, 6 de marzo de 2011

Santabárbara - Charly




Como vereis ando un poco perdida por aquí. He estado entretenida con otras cosillas y me ha faltao tiempo e inspiración.
Pa ponerme de nuevo las pilas voy a subir este video que tiene sus añitos.
Me recuerda la época adolescente de mi hermano y mi hermana y todos sus amig@s y yo merodeando por alrededor de ellos. Y sobre todo la anécdota de esta canción con respecto a mi perro gordinflón Charly, ya que siempre se ha porfiado en mi casa de quién fue la idea de ponerle ese nombre al perro.
Yo siempre perjuré que fue idea mía pero la verdad era que estábamos pensando que nombre ponerle al pequeño cachorrito (luego se transformó en ballenato) mientras sonaba esta canción y un amigo de mi hermano dijo Charly pero nadie más que yo lo oyó y entonces salté yo -¡Charly! y mi padre confirmó: -Se va a llamar Charly.
Y desde siempre yo decía que era la que le había buscado el nombre al perro y mi hermana se burlaba de mi (aún saca de vez en cuando su famosa fracesita - ¡ahh si tú eres la que le pusiste Charly al perro!)
Y el otro día le conté toda la verdad, de cómo surgió el nombre y de que la idea fue del Sanz.
Pero YO SOY LA QUE LE PUSO EL NOMBRE (te enteras hermanita? pa que sigas metiéndote conmigo ea.

viernes, 18 de febrero de 2011

OLE!

Esa gitana esta looooca
esa gitana esta looooca
que quiere que vaya ar campo
yeyeeeé
y a cogee bellotaa
OLEEE
esa quien e tu tia Paqui?

La enviada (Bernard Taylor)




                   El cuco es un pájaro muy especial. Pone un huevo en un nido ajeno y se marcha. Apenas el polluelo sale del cascarón lo primero que hace es arrojar fuera los otros huevos. Dueño y señor del nido, con dos padres para cuidarlo y alimentarlo, se queda allí hasta que le llega la hora de marcharse a su vez. Sí, el cuco es un pájaro muy especial.
Como también lo es esta novela. La acción está planteada de tal manera que las pequeñas coincidencias misteriosas, los accidentes inexplicables, las sorpresas desagradables parecen tener siempre el mismo causante. Y esa es una explicación que ninguna persona cuerda aceptaría. El lector se preguntará constantemente si es posible que ocurra una cosa así. También se lo preguntan los personajes. Y nadie se atreve a hablar. Cada uno está prisionero en su propio miedo, solo, luchando contra un enemigo al que no pueden destruir.
Una novela apasionante por su argumento y porque consigue un clima aterrador sin recurrir a ninguna estridencia. Todo parece tan simple, tan natural, como la estratagema del cuco.

lunes, 14 de febrero de 2011

Más bellos recuerdos

    


No tengo palabras que puedan expresar lo que me produce ver esta fotografía. Es todo sentimiento.
Mi querido padre y mi querido hijo.

miércoles, 9 de febrero de 2011

Rima a una madre

Mi madre venía de Madrid
y cuando venía por Despeñaperros...
Ya le asomaba la nariz.

                                                                 Las rosas son rojas
                                                                 las estrellas, azules
                                                                 y tú... y tú...
                                                                 ¡y tú eres muu feaa!!

autor:  mi hijo que me las ha dedicao

Triana

viernes, 4 de febrero de 2011

Periodo Romanticón

                                        


                                                    GUSTAVO ADOLFO BÉCQUER



                                       


                                                            Por una mirada, un mundo;
                                                            por una sonrisa, un cielo;
                                                            por un beso... yo no sé
                                                            qué te diera por un beso.




Los suspiros son aire y van al aire!
Las lágrimas son agua y van al mar!
Dime, mujer, cuando el amor se olvida
¿Sabes tú adónde va?





     Alguna vez la encuentro por el mundo
y pasa junto a mí;
y pasa sonriéndose, y yo digo:
-¿Cómo puede reír?
Luego asoma a mi labio otra sonrisa
máscara del dolor,
y entonces pienso: -¡Acaso ella se ríe
como me río yo!



                                                                   ¿Qué es poesía?, dices mientras clavas
                                                                      en mi pupila tu pupila azul.
                                                                      ¿Qué es poesía? ¿Y tú me lo preguntas?
                                                                    Poesía... eres tú.



miércoles, 2 de febrero de 2011

Pa mi hermana.

Quilla no me presiones que tú bien sabes que los escritores tenemos que estar mu relajaos pa inspirarnos.
Me tendré que ir a mi cabaña de la montaña, rodeada de ese lago tan azul.
Me daré un paseo en  mi barquita mientras respiro un aire fresco y a la vez embriagador que desprenden las flores silvestres,  escuchando cantar los pajaritos revoloteando por los alrededores de los sauces llorones que rodean el lago.
Me tenderé y miraré el cielo azul con algunas nubes blancas parecidas de algodón, las cuales se me presentan con distintas formas y me hace utilizar la imaginación.
Una de ellas es toda redonda. Mientras se me acerca va cambiando y adoptando una forma humana.
Cuando la tengo justo encima de mi la miro, reconozco en ella la silueta de mi hermana sujetando con una correa a su perrita Luna. Ésta última viene hacia mi como un "bou embolat" (pa luego darme un empujón  clavándome sus uñas de la L...la S...)
Y mi querida hermana me dice con todo el amor del mundo "¡Quilla, floja, vuelve a la realidad y actualiza ya!!


                                                          The end.

                                                                                                             P.D. hoy he cumplío

sábado, 29 de enero de 2011

miércoles, 26 de enero de 2011

Qué hubiera sido de mi vida si...

Hoy mi historia va de un gran despiste
Los que me conoceis bien sabeis  lo despistada que soy.
Ocurrió en una discoteca.
Estaba con mi hermana, nuestra amiga y los "amiguitos de ellas" (yo no tenía "amiguito") así que cuando  se iban a bailar, yo me quedaba sola dando vueltas por allí encontrándome con conocidos.
Recuedo un día  de estar en la terraza de la discoteca  hablando y  tomando unas cervezas con un chaval guapísimo.
Al rato llegó mi hermana y me dijo que nos teníamos que ir. Nos despedimos hasta otra, sin saber nada uno del otro ni siquiera nuestros nombres. Lo cierto es que el poco tiempo que estuvimos juntos lo pasamos bastante bien y a mi me gustó él.
Llegamos otro día a la discoteca y lo mismo, mi hermana y mi amiga por un lado y yo dando vueltas por allí
Después de estar un rato bailando fui a buscar dónde sentarme, pero aquel día había mucha  gente y no veía ningún sitio libre.
Por fin veo un asiento junto a un chaval que me hacía señas ( no me gustaba sentarme al lado de desconocidos ) pero me dí cuenta de que era el mismo chaval con el que había estado semanas antes en la terraza y me senté a su lado. Empezmos a hablar y esta vez si nos presentamos. Me recordó que nos habíamos visto unos meses atrás en un autobús. Él  venía licenciado de la mili y yo con un conocido de él. Le dije que era un poco despistada pero que si lo recordaba.
Pues bien, desde ese momento empezamos a salir. Hasta hoy, ya que es mi marío.
Vamos a lo del despiste.
Llevaba meses saliendo con él y empezamos a recordar de cómo nos conocimos. Entonces le hablé del día de la terraza, de lo guapo que estaba con las ropas que llevaba y de por qué no se las había puesto más.
Mi novio algo extañao me dice que él nunca ha llevado esas ropas. Yo más extrañá que él le digo:
-Entonces... ¿tú quién eres? Vamos que yo me acerqué a ti porque eras el de la terraza.
 Mi novio to mosqueao y yo todavía más porque yo quería haber salido con el otro.
Además desde el día que empezé a salir con mi novio ya no volví a ir a esa discoteca hasta pasados unos años.
Algunas veces pienso si "mi amor de terraza" siguió yendo por allí , si me buscó y qué hubiera sido de mi vida si...
Lo cuento a mis amigos y nos hace bastante gracia. No tanta a mi marío que ya bastante harto de esta historia ha llegado a decir que sería él  pero con ropa prestada de algún amigo. Yo me río, le digo que estoy con él por un despiste y aún se mosquea más. Pero es la pura verdad jajajajajaja

Yo y mis despistes :)

lunes, 24 de enero de 2011

Me colé en una fiesta



Esta historia es muy breve pero con su puntito divertido.
Cada vez que oigo esta canción me viene a la mente dicha aventurilla.
Os cuento:
Era Nochebuena.
En esas fechas y por aquellos años pocas discotecas y pubs abrían sus puertas. Así que lo más típico eran las fiestecillas hechas en corralones, casas a medio construir y las menos, en alguna vivienda confortable. Claro está que eran fiestas de "solo amigos".
Aquella noche, después de una cena familiar, mi hermana, mi prima y yo, quedamos con unos amigos para ir a divertirnos sobre la marcha, pues no habíamos planeado nada.
Después de dar unas cuantas vueltas por el pueblo y no encontrar dónde ir, nos encontramos con un amigo de nuestros amigos.
Éste, nos invitó a ir a una fiesta de unos amigos de él. Nos indicó el lugar y se fue.
Como estábamos cansados de dar vueltas y hacía bastante frío decidimos de ir a dicha fiesta.
Llegamos al lugar y... ¡qué bien! era en un piso todo muy bien organizado.
Empezamos a buscar caras conocidas pero no veíamos a nadie.
Nos encontrábamos un poco cortados. Nos pusimos a bailar cuando apareció el amigo que nos invitó.
Nos llevó a la cocina y nos dijo que cogiésemos algo para picar y beber, cosa que hicimos y nos fuimos de nuevo a bailar.
Estando bailando notábamos que los demás empezaban a cuchichear y a mirarnos (la verdad que desencajábamos en el grupo, todos ellos muy "pijos" y nosotros algo desaliñaos, tipo "hippy")
Pues nada nosotros allí, a lo nuestro, bebiendo y bailando cuando se nos acercan un grupito y nos preguntan:
-A ústedes quién os ha invitado a nuestra fiesta?
A lo que le contestamos:
-Fulanito (no me acuerdo del nombre) ése que va hacia la puerta.
Y nos dicen:
-Pero si a ése no le conocemos, se ha colado aquí igual que ustedes y lo acabamos de echar! Así que haced el favor de iros.
Dejamos nuestros vasos y salimos de allí pitando, riéndonos y diciendo que cuándo viésemos al tipo éste que nos invitó se iba a enterar.
Pasamos toda la noche entre risas pensando en cómo nos habíamos colado, cómo el "anfitreón" nos llevó a la cocina y nosotros cogiendo de todo y de cómo nos miraban y cómo salimos todos a escape.
Una Nochebuena, buena. jajajaja.


¡ALLI ME COLÉ Y EN TU FIESTA ME PLANTÉ!

jueves, 20 de enero de 2011

"¡Mi bolso, mi bolso!"

Esta anécdota se la dedico a mi más que amiga A.
Todo empezó con un papaleo de herencia de un testamento de mi abuela,  hacia mi padre .
Nos informamos de lo que se tenía que hacer para poder pasar los bienes de una a otro.
Como ya he contado en otra de mis historias, somos cuatro hermanos.
Mi hermano mayor, mi hermana y yo, decidimos que cada uno nos dedicásemos a  hacer las diversas gestiones que se requería.
A mi me tocó ir a terminar ya con todo el papeleo. Llevaba en una bolsa de papel ( de Zara) todos los documentos que mis hermanos habían conseguido arreglar,  más todos los relacionados con el testamento y escrituras de la casa.
Como no quería ir sola le dije a mi más que amiga A. si me podía acompañar, la cual aceptó venir.
Fuimos en autobús que nos dejaba cerca del lugar.
Llegamos temprano y decidimos ir a desayunar. Entramos en el primer bar que vimos más cerca,  nos quedamos un poco sorprendidas, pues habían gentes "rarillas".
Nos pusimos a desayunar, mientras disimuladamente inspeccionábamos al personal y engullíamos el desayuno para marcharnos de allí lo más rápidamente.
Una vez fuera empezamos a reirnos y comentar cómo se nos había ocurrido ir allí sin primero echar un vistazo y dar el visto bueno.
Ibamos caminando, con nuestras charlas, cuando de frente se nos acercaba un  personaje de poco fiar que nada más que hacía mirar a los lados y mirarnos. Nos hizo sospechar que no traía nada bueno y nos sujetamos bien los bolsos.
De pronto me paro y exclamo ¡mi bolso, mi bolso!
Dicho sujeto se asusta, dá un brinco y dice "¡coñ.. que yo todavía no me he acercao a ellas...!"
Yo me vuelvo y salgo a correr con todas mis fuerzas y seguía diciendo ¡mi bolso, mi bolso!
Mi amiga se queda petrificá, muerta de miedo, sin saber que me pasaba,  viéndome como me iba corriendo dando gritos y además que llevaba el bolso. Viendo también como el "supuesto choriso" se daba media vuelta y salía corriendo hacia el lado contrario.
La pobre decidió salir corriendo detrás mía.
Yo mientras iba  como una loca,  repitiendo lo mismo, cuando me cruzo con unos policías y un sujeto esposado. Aparto a los policías y paso corriendo entre éstos y el delincuente.
Mientras todos se me quedaron mirando con cara de sorprendidos (eso lo sé porque más tarde recordándolo todo, me lo contó mi amiga).
 Pues bien os cuento lo que me pasó.
Cuando vi a dicho sujeto de frente, pensé, éste no trae buenas intenciones y me sujeté el bolso (cosa que mi amiga también pensó e hizo).
Al sujetarme el bolso me dí cuenta que no llevaba la bolsa de los documentos, pues la había soltado en el suelo del bar en que desayunamos. Me entró tal pánico que se me juntó  el miedo a que me quitaran el bolso con el de haber perdido los documentos tan importantes. Yo solo pensé en correr para llegar rápido a ver si aún estaban allí aunque imaginaba que alguna de aquellas personas seguro que se habrían llevado la bolsa.
Pues bien,  llegué al bar con mi cara de pánico, me vió el camarero y me lo veo salir con mi bolsa de "Zara" que en ese momento quise más que a mi vida misma. Le dí mil gracias al camareo. Le dije que no sabía el peso que me quitaba de encima y le expliqué que llevaba unos documentos muy importantes. Éste me dijo que salió en nuestra busca pero no nos vió.
A ésto que llega mi amiga cansá de correr, con la carita "desencajá," preguntandome qué me había pasado. Le cuento lo de la bolsa.
Ya un poco repuestas empezamos a reirnos.
Puedo aseguraros que estuvimos media hora sin parar de reir.
Luego recordábamos el tema y otra vez a reir. Así hasta hoy.
Cada vez que salimos con amigas, lo contamos, lo volvemos a revivir y nos vuelve a dar la risa.
Como me ha ocurrido hoy contándolo por aquí y como le ocurrirá a ella cuando lo lea ( eso es seguro, verdad mi más que amiga A?)


P.D. Fue una buena terapia de risas. Otro día os cuento una de subidón de adrenalina, con la misma amiga.

lunes, 17 de enero de 2011

A través de aquella ventanita.

Buscando esta pequeña historia, la cual he recuperado de lo más profundo del baúl, pues yo tendría unos siete u ocho años.
Os cuento que somos cuatro hermanos dos niños y dos niñas.
Cuando éramos pequeños, mis padres tenían  una tienda de alimentación y ésta se encontraba en la misma casa dónde vivíamos, es más,  la trastienda colindaba con una  habitación de la vivienda donde se comunicaban por una ventana.
Aunque la casa era muy grande nosotros cuatro dormíamos en una habitación junto a mi entrañable y queridísima abuela, en dos camas enormes.
Como en todas casas donde hay varios niños se sabe que lo que no idea uno lo idea otro.
Pues bien, encontramos la forma de acceder a la tienda sin ser vistos por nuestros mayores y esa entrada era por la ventana que daba a la trastienda.
Aunque en verdad nunca nos prohibieron entrar a la tienda pero era más divertido y emocinante hacerlo a escondidas  y saltando por la ventana.
Y para qué entrar en la tienda a escondidas?
Para hartarnos de coger chucherías y demás caprichos.
Hasta teníamos un perro, charly, que cuando se colaba a la tienda robaba chupachups, los pelaba y se lo comía como nosotros, chupándolo con el palo fuera de la boca ¡qué gracioso se veía!
Bueno a lo que iba. Por las noches cuando todos creían que estábamos acostados y dormidos, nos levantamos y, caminando agachados (otras veces a rastras) con las risas nerviosas y montándonos nuestras películas de espías, entrábamos a la habitación de la ventanita y ... a saltar a coger chuches! Después de cogerlas, vuelta atrás para volver a meternos en las camas y a oscuras comerlas.
A veces cuando ya me había comido lo mío le pedía a mi hermana y ella me decía que no tenía más a lo que yo le decía:
- pues huele a pipas..
Y ella:
- uy toma! me he encontrado una.
Y me daba una sola pipa. Al rato la volvía a escuchar comer pipas, yo se lo decía, pero ella me decía que ya no tenía más. De vez en cuando a mí  me venia ese olor tan rico que hacía que aún se me apeteciera más y  mi hermana seguía engañándome con que no le quedaban. Con los años me confesó que sí, me engañaba.
En fin, esas escapaditas nocturnas duraron un largo tiempo.
Ahora os cuento que a mi hermana de buenas a primera le empieza a doler un oído.
Os preguntaréis qué tiene que ver el oído con las aventuras de las chuches, yo os digo que tiene que ver y mucho.
 Le decían que tenía un tapón y.. venga a echarle agua oxigenada pa reblandecerlo! además de otros remedios pero nada, siempre con la molestia.
Yo creo que su caracol del oído tiene que ser rubio de tanta agua oxigenada que se ha echao.
Pues la pobre se llevó así años. Pero un día que estábamos en el recreo del colegio la miro y le veo una cosa negra saliéndole del oído. Se lo digo y ella asustá: ¡ay quítamelo!
Lo cojo con miedo y le saco un trozo de regaliz del duro todo lleno de cerumen.
Nos quedamos pasmás pero a ella le entró un alivio en el oído.
Cuando llegamos a casa le dijimos a nuestros padres lo ocurrido y mi hermano pequeño (dos años menor que yo) estaba delante y dice:
-anda ese "arazú" se lo metí yo a la hermana en la oreja cuando estaba dormía.
Y en ese momento mis padres no sabían si reir o enfadarse ya que mi hermanito era un poco embusterillo.
Mi hermano siempre juró que él había sido el causante del trozo de regaliz en el oído de mi pobre hermana.
Pero aún nos queda la duda  de si  fue ella la causante por dormir comiendo chucherías y el regaliz se le metiese solo. Aunque lo vemos muy difícil pero no imposible.


Moraleja: no te lleves chuches a la cama, sobre to "arazú" y más si tienes un herman@  cerca.

sábado, 15 de enero de 2011

VACACIONES "SAJERÁS" EN TORREMOLINOS


                                                            LA CHISPA
3 de julio, aeropuerto de Sevilla.
Mi sobrina y yo esperando la llegada de mi hija de unas vacaciones a Londres con compañeros de instituto.
Veíamos como llegaban gentes de otros vuelos, con sus maletas a cuestas y algunos con cara de felicidad.
 Nosotras los mirábamos y  !qué suerte poder hacer un viajito!
Salta mi sobrina y me dice: po yo quiero hacer un viaje, nos vamos?
Yo que hablo antes de pensar le contesto: po vale, cuando llegue mi hija si quiere venir nos vamos.
Llega mi hija y después de recibirla le pregunto si tiene ganas de otras vacaciones y ella sin pensarlo dos veces - Vale, me apunto.
Quedamos en hablarlo cuando llegasemos a casa.
                                                            
                                                              LAGUNA

Llegamos a casa y no se habló más del asunto del viajito que habíamos planeao.
Pasaron cinco días y parecía que el tema de las vacaciones había quedao  por ahí como olvidado.


                                                    DECISIÓN INMINENTE

Viernes a medio día me encuentro a mi sobrina y sacamos a relucir lo de las vacaciones.
-¿Qué va a pasar, nos vamos o qué?
-Vale, nos vamos. Esta tarde nos llegamos a una agencia de viajes.
Y eso hicimos. Nos llegamos a la agencia más cercana para no perder tiempo.
Pensamos de ir a Benidor pero teníamos que ir en tren y queríamos salir el próximo lunes y además estábamos a mediados de julio que ya casi todos los hoteles estaban completos.
Poco más tarde salimos con la reserva para un hotel de cuatro estrellas en Torremolinos.
Lo encontramos bastante económico para ser un hotel de esa categoría y salimos super contentas.
Ahora lo que nos quedaba sacar billetes y preparar maletas, todo en un tiempo record pues era viernes tarde y teníamos que estar en el hotel lunes a media mañana.
Quedamos a una hora temprana para comprar los billetes pero como es normal en las mujeres pues nos retrasamos bastante.
Llegamos a ventanilla y el vendedor nos dijo que ya no se podían sacar los billetes que hacía media hora que se habían cerrado las ventas para ese viaje.
Habría que ver las caras que se nos quedó que el buen hombre nos hizo el favor de vendernos los billetes.
BIEN!


                                            PRÓXIMA PARADA... TORREMOLINOS

Lunes 8 de la mañana. Subimos al tren y...pa Torremolinos!! ¡Qué nervios!
 Habia ocurrido todo tan rápido, y  con un fin de semana algo estresante por los preparativos pero ya estábamos camino de nuestra aventura. Porque eso si, iba a ser una aventura por lo menos para mi, sin saber nada de la zona dónde íbamos a ir.
 Además nunca había viajado sola y menos con el cargo de mi hija de 14 años y mi sobrina  de 18.
Llegamos a Málaga y tuvimos que coger un cercanias para llegar a nuestro destino y por fin ¡Torremolinos!

-Primer problema: escaleras autómaticas averiadas. Teníamos que subir con las maletas una infinidad de escalones. Maletón de mi sobrina unos cien kilos aproximádamente ( ya sabemos la cantidad  de ropa que llevamos las mujeres, sobre todo una jovencita, además le dije que echase ropa para mi ya que yo apenas tuve tiempo de ir de compras.) Tambien fuimos caritativas y ayudamos a subir a unos ancianos.

-Segundo problema: una vez fuera de la estación. Y ahora hacia dónde vamos? ¿dónde se ecuentra el hotel?¿cogemos taxi?, pero en internet salía que estaba a pocos metros de la etación, ¿a quién preguntamos?
Decidimos  empezar a caminar y preguntamos a un barrendero quien nos dijo que no sabía del hotel pero que la playa a la que íbamos estaba algo lejos.
Pues nada nosotras arrastrando maletas, seguimos caminando unos pocos metros y de buenas a primera exclama mi sobrina ¡Ahí está el hotel!

-Fuera problemas. Ahora anécdotas y risas en todo momento
Entramos al hotel con una recepción muy normalita para un hotel de cuatro estrellas.
Nos designan una séptima planta y yo con mis claustofobia a los ascensores le digo si no le queda una más bajita y nos dicen que ha quedado una libre en la segunda pero que la están preparando y mientras si queremos podemos ir a echar un vistazo al hotel.
Muy bien, soltamos maletas y nos disponemos a inspeccionar el hotel. Primero ¡la piscina y el jacuzzi!
Nos encontramos con una piscina muy pequeña y  nos quedamos un poco pasmadas mirando por los alrededores como buscando algo y salta mi sobrina y dice - No me lo puedo creer, ésta será la piscina de los niños, dónde está la otra? y eso es el peazo jacuzzi ?
Ya empezamos a reirnos y sin poder explicarnos cómo habían hecho las fotos que habíamos visto por internet que se veía todo enorme.
Bueno vayamos a ver el gimnasio dónde pensábamos ir todas las mañanas nada más levantarnos y ponernos nuestras mayas y deportes (cosa que no hicimos ningún día, sólo estuvimos tumbás o bien en la cama, en la piscina o en la playa )
Empezamos a subir y bajar escaleras, a recorrer pasillos porque  no dábamos con el gym hasta que lo encontramos en una tercera planta toda solitaria.
El gimnasio estaba muy bien con sauna incluida pero como he dicho antes no había nadie. Así que venga sección de fotos en sauna y aparatos.
Ya un poco agotada me siento en una pequeña recepción bajo una ventanita, por curiosidad retiro las cortinas y me quedo sorprendida con lo que ví y pregunto:
-¿ En qué planta estamos?
A lo que  me responden 
-En la tercera
Les digo que se asomen por la ventana. Sus caras quedaron pasmadas, pues había un coche y una moto aparcados al nivel de nuestras cabezas.
Entonces salta mi sobrina con una cara de terror:
-Si en la tercera  planta está la calle entonces nosotras que vamos a la segunda, dónde nos  meterán en un zulo? ( el hotel tenía un gran desnivel )
Otra vez risas, pero ya todas nerviosas deseando ver la habitación a ver que nos encontrábamos.
Ya por fin nos dieron las llaves y entramos. Todo estaba bastante bien con un buen baño.
-Salgamos a la terraza a ver las vistas!
Salimos fuera y nos topamos con una chapa que era el tejado de un salón del hotel que nos quitaba gran parte de vista, sólo veíamos un trocito de la mini piscina y un poco el mar a lo lejos. Y no vean lo que se calentaba la chapa con el sol.
-Vamos a probar las camas!
Mi sobrina se echa y dice que es cómoda, mi hija lo mismo, yo me echo y noto un bulto en la espalda, ¡un muelle que sobresalía del colchón! Se la cambié a mi sobrina que ella decía que no le importaba.
Nos pusimos los vikinis y nos dirigimos al comedor. Eso si, la comida era exquisita, todo estaba buenísimo.
Nos fuimos a la playa, el paseo lleno de tiendas, nos gastamos casi todo el dinero el primer día.
El agua del mar estába helada y casi no nos bañamos sólo tomábamos el sol así que nos pusimos como tizones de negras.
También habían unos cuerpos esculturales que fotografiábamos didimuladamente con los móviles.
Como por las noches en el hotel no había ambiente una noche nos dedicamos a inspeccionar las plantas de éste. Todo estaba tan solitario y silencioso que parecía un hotel fantasma y daba miedo andar por aquellos pasillos. Escuchamos un ruído y salimos corriendo escaleras abajo, a mí se me caía el pantalón del pijama y mi sobrina detrás mía echándome fotos a mis posaderas.
Otro día recorriendo la ciudad vimos una tienda de "pirsin" y tatus. Mi sobrina y yo salimos con un "pirsin" en el labio, menos mal que nos lo hicimos en los últimos días porque no podíamos comer.
Llegó el último día y nos dejaron una hojilla dónde poder exponer alguna reclamación o alguna queja que tuviésemos.
En broma pusimos que al colchón le salía un muelle, la ducha no tenía presión (eso no era cierto pues temíamos ducharnos porque salía el agua con mucha fuerza y encima quemadas por el sol, la ducha era un suplicio) la piscina "sajerá", el  jacuzzi "sajerao"... pero que pasamos unos días buenísimos y que volveríamos a repetir.

                                  ¡¡FUERON UNAS VACACIONES SAJERÁS!!

jueves, 13 de enero de 2011

Shhhhhh no hagamos ruído

A mi hermana que está malita y de bajón,

Esta historia es de hace ya unos añitos. Mi hermana y yo eramos unas chavalitas de 15 y 17 años(más o menos)
Era verano, el mes de Julio. Se celebraban las fiestas de nuestro pueblo que en aquellos años creo duraban tres días.
  En esa época yo empezaba a salir en compañía de mi hermana y  una amiga en común.
En aquel tiempo si no era una fiesta muy señalada, las discotecas, pubs y demás salas cerraban no muy tarde o si no cerraban apenas había ambiente y te recogías empezando la noche, por eso estábamos deseando que llegase una fiesta así para poder  disfrutar más horas y llegar a casa más tarde.
Volviendo a las fiestas del pueblo, era ya el último día y al siguiente nuestros padres tenían que trabajar por eso no queríamos llegar  a casa muy tarde pero como estábamos muy animadas pues no teníamos ganas de recogernos y queríamos aprovechar lo que quedaba de feria y se nos hizo un poco tarde.
Antes de entrar en casa, como sabíamos que estaban todos acostados decidimos que nos iríamos directas al dormitorio procurando no hacer ruídos para que así no se dieran cuenta de a la hora que habíamos vuelto.
No queríamos ni encender la luz de la habitacíon, puesto que la de nuestros padres estaba enfrente, pero como estaba muy oscuro y no se veía nada  me fui a ciegas a encender la lamparita de la mesita de noche.
Mi hermana me seguía detrás.
Llego a donde la lámpara y no funcinaba, entonces recordé que a veces se aflojaba la bombilla y que dándole una vueltecita a la bombilla se ajustaba y encendía.
Pues bien imaginemos por un momento, Sevilla, 26 de Julio, un calor asfisciante, que en aquellos años nos teníamos que refrescar con ventilador y abanico o una ducha a las cuatro la mañana, porque  de aire acondicionado nada, hasta creo que ni habría nacido quién lo inventó.
Sigamos por dónde lo dejé. Yo, intentando encender la lámparita (creo que estaba sin zapatos para no hacer ruído pero si recuerdo mis manos mojadas de sudor por el calor).
Si, eso pasó, lo que estais pensando. Me dió tal calambrazo que empecé a chillar y la bombilla pegada a mis manos que no podía soltar.
 Mi hermana que estaba detrás mía y sin saber por qué chillaba yo, ya que seguíamos a oscuras y no se podía ver nada, qué hizo ella, pues ponerse a chillar también y pa colmo va y se agarra a mi.
 Otra vez lo que estais pensando, si, se le pasó corriente a ella y las dos allí medio electrocutadas porque antes no había diferenciales o como se llame que automáticamente hubiese cortado la corriente.
Ahora las dos chillando y ella recibiendo "voltaje" que yo le traspasaba  pero al sujetarme mi hermana parece ser que ya no recibía yo tanta electricidad y  pude reaccionar dando un tirón de la lámparita que se desenchufó, pero... cataplás al suelo y se rompió.
Podeis imaginar lo siguiente, todos levantados, asustados, sin saber qué ocurría y nosotras -Na, no pasa na, es que se nos ha caído la lámpara.
Po nos riñeron ea.
Con el tiempo contamos la verdad y nos reimos cada vez que lo recordamos.
Así que lo he contado para que nos volvamos a reir.



                                                                           

miércoles, 12 de enero de 2011

Mis consejitos para adelgazar

Voy a contar este pequeño suceso que hoy me ha hecho reir con ganas y que me sigue haciendo mucha gracia.
El caso es que tengo a mi amiga MJ todos los días con la obsesión de la gordura (no está gorda pero ha cogido algún kilillo y eso la tiene desesperaita). El tema de su gordura sale todos los días a relucir, incluso estamos hablando por teléfono (cosa que hacemos a diario)  de buenas a primera me dice, escucha ( y oigo un cloc, cloc, cloc. Es ella dándose palmadas en la barriga).
-Esto no puede ser, tenemos que hacer algo, tenemos que volver a salir a andar que eso es lo que más me hace porque bla, bla bla...
Ella siempre me involucra en lo que haya decidido hacer o bien apuntarnos al gimnasio o salir a andar o coger bicicleta...y yo, vale lo que tú quieras, sabiendo que a los dos días ya se harta y lo deja.
Bueno, pues como lo de hacer ejercicio no le va, le he buscado una solución para perder algún kilillo.
Como estoy bastante delgada le he dicho que haga las comidas como yo las hago, sobretodo una merienda cena de un vaso de leche y una tostada de aceite con un ajito restregao.
Cuando se lo dije me dijo sorprendía ¡ Eso voy a comer, y tan temprano con lo tarde que yo me acuesto! Eso pa las que se acuestan a las horas de las gallinas (ella suele acostarse de madrugá, dice que tiene insomnio y es que está enganchá con el ordenador).
Y yo´- tú haces eso y verás como pierdes peso, además si comes bien durante el día no te vas a morir porque estés unas cuantas horas sin comer.
Ella- bueno entonces cómo hago ( y me repite lo que le he dicho)
El caso es que hoy hemos ido juntas de compras, cosa habitual que hacemos algunos días a la semana,
y ya de vuelta sobre la nueve de la noche le he dicho- Qué hambre tengo en cuanto llegue a mi casa me voy a preparar un peazo bocadillo...
Se para en seco y mirándome mu seria y sin dejarme terminar de hablar me dice- Eso, tú ahora llegas a tu casa y te preparas un bocadillo con to lo que te entre ganas y yo me tengo que comer a las siete la tarde un vaso de leche y una tostaita con un ajito... ¿cómo?  ¿refregao? y ya hasta mañana, noo? Po tú no cenas eso??
Y empecé a reirme porque de la forma que me lo dijo, toa mosquea y yo pensando en el bocadillo que me iba a comer y que yo me había puesto de ejemplo de que yo apenas como de noche.
Al final nos hemos reido las dos y yo se que esta noche va a comer pinchitos con tortilla seguro y yo he comido mi tostá con un vaso de leche (pero no le he refregao un ajito le he metío queso y choped, eso si de pavo).   :)

después de un día triste nace otro feliz

martes, 11 de enero de 2011

yo y mis caramelos pa la tos

Posted by Picasa

Uffff qué aburrimiento...

Llevo una hora viendo parpadear la barrita ésta de escribir. Empiezo a escribir algo, al segundo renglón lo borro. Es que yo no tengo el don de mi hermana "Bronte" y más si estoy bajo la presión de que tengo que escribir algo a la fuerza. El caso es que anoche conseguí escribir pero no lo supe publicar y es que ni me acuerdo de lo que puse (encima tengo esta cabecita tan olvidadiza).
Hermanita tú crees que yo podré llenar el baúl con recuerdos si no me acuerdo de lo que hice ayer?
Tendría que rectificar y en vez de llamar al blog "el baúl de los recuerdos" sería mejor llamarlo "recordar que tengo un baúl".
Lo siento pero no tengo nada de inspiración, será mejor que suba una cancioncilla o alguna fotito o aún mejor echar una cabezadita y tal vez con la mente despejada me salga algo.
Bueno mejor lo dejo y ya volveré, espero no ser tan aburría como lo estoy siendo ahora (anda que voy a tener bastante seguidores jajajaj).
Hasta pronto :)